Barrios enteros sin servicio de energía eléctrica y otros asistidos por grupos electrógenos y bombas de agua, árboles caídos, treinta viviendas que sufrieron voladuras de techos, son algunos de los datos más relevantes del informe que dieron los titulares de Espacios Públicos, Obras y Políticas Sociales sobre las consecuencias del temporal del fin de semana y el accionar del Municipio.
La secretaria de obras informó que el Municipio está en constante comunicación con la empresa Edenor acerca de los cortes y luz con el fin lograr lo antes posible el restablecimiento de energía en aquellos barrios donde haya cortado, actualmente se encuentran sin servicio eléctrico los barrios Santa María, San Eduardo y El Moro. Asimismo, dio a conocer que el Municipio ayudó a ABSA con cinco grupos electrógenos en las bombas de agua de los barrios El Zorzal, La Paz, El Prado y en San Eduardo para mantener su funcionamiento.
El secretario de Espacios Públicos explicó que los barrios más afectados por el temporal fueron El Palenque, El Fonavi, Independencia, Santa María y ruta 40 entre calle Piedras y D'Agnillo. Además, hubo árboles caídos en los barrios Killys y Gándara, con respecto a esta problemática trabajó la cuadrilla de poda en colaboración con los bomberos voluntarios para liberar los accesos a la ciudad y al hospital. También, se trabajó en articulación con Acción Social para responder a las necesidades de aquellos vecinos que sufrieron voladuras de techo o que la caída de un árbol le haya dañado su vivienda.
El secretario de Políticas Sociales afirmó que comenzaron los trabajos el sábado a la noche y se extendieron ininterrumpidamente hasta última hora del domingo. Fueron 30 viviendas que sufrieron voladuras de techo total pero el número aún no es final ya que se siguen sumando al restablecerse las líneas de teléfono, también fueron 30 aquellas cuyo techo se dañó parcialmente y dos casas fueron completamente destruidas. Con respecto a familias evacuadas se presentó un caso en la zona de la Escuela 11 que actualmente se encuentra en la Casa de Abriga y dos familias en el Torchiaro que están en la UMI del mismo barrio. A las familias damnificadas se les brindó ropa seca, colchones, frazadas, alimentos como contención en el momento y a la mañana del domingo se fue a ver la situación concreta de cada familia y sus necesidades.